Miguel Angel Jean Sano Otro Prospecto Millonario

20.02.2010 18:28

Muchos fueron los momentos de angustias que Miguel Ángel Sanó pasó previo a lograr el sueño de toda su vida. Una de las habitaciones de su antigua casa, era el rincón de largas horas de llantos.

El tic-tac del reloj pasaba y su caso continuaba sin por lo menos recibir una esperanza de que su problema (supuesta adulteración en su edad) pudiera ser resuelto. Sus mejores aliados para que él continuara de pie eran Dios y su familia.

Pero una luz al final del camino se visualizó.

Las lágrimas que había derramado durante ese tiempo pasaron a ser toda sonrisa, esperanza que nunca perdió y hoy la vida al joven prospecto le brindó lo que tanto anhelaba: ser firmado por Fred Guerrero, hijo de Epifanio Guerrero, para los Mellizos de Minnesota por un monto de 3,1 millones de dólares y más tarde obtener el visado norteamericano.

“Soy la persona más féliz del mundo”, dijo Sanó, mientras acariciaba un pequeño rottweiler (perro) en la galería de la casa de su madre, la cual le había comprado el año pasado a un costo de más de cinco millones de pesos. “Gracias a Dios que en ese momento puedo comenzar a sonreír, luego de varios días de angustias.

Fueron muchas las lágrimas que derramé, en especial en mi habitación y en el baño, que eran mis refugios para ese desahogo”, agregó.

El cariño que Sanó le profesa a su madre, Melania Sanó, es tan grande que no la quería dejar sola, por lo que optó por construir otra casa en la urbanización Jazim.

“Moreno Tejada (la persona que lo preparó) me dijo que, debido a que había firmado con los Mellizos por una cantidad de dinero grande, tenía que cambiar de lugar y nos mudamos para acá. Ahora estoy construyendo la que será mi casa. Lo hice así para estar más cerca de la familia”, expuso el talento.

Pero los logros que está cosechando Sanó no solo se quedan en la casa. En la marquesina se encuentra estacionada una lujosa jeepeta color negro que también adquirió, así como de otros inmuebles que dentro de poco tiempo comenzará a disfrutar.

“Tomar la decisión de mudarme a este sector, luego de haber durado varios años en el Invi de Villa Hermosa, fue difícil porque dejaba atrás a una serie de persona que fueron parte esencial durante en mi crecimientos fue duro, pero eso no quiere decir que no los visite”, manifestó el nuevo millonario.

Por Julio Castro, El Caribe